El Incesto



El término incesto deriva de la palabra latina “incestus” que significa impuro.

Desde el punto de vista del derecho eclesiástico define el comercio carnal ilícito que se comete por parientes dentro de los grados en que se prohíbe el matrimonio.

El Antiguo Testamento maldice y castiga con la muerte al que comete incesto; y la Iglesia lo condena por considerarlo pecado grave, entre consanguíneos y entre personas afines con parentesco legal o espiritual, por ejemplo entre confesor y penitente, bautizado y padrino, etc.

El Código de Derecho Canónico lo castiga entre parientes consanguíneos en línea recta sin límites y en línea colateral hasta el tercer grado inclusive y entre afines hasta el segundo grado inclusive.

En los Códigos Penales modernos se castiga solamente entre ascendientes y descendientes, y entre parientes de línea colateral en primer grado.

Algunas formas de incesto son tabú en todas las sociedades pero varían según las culturas y el período histórico.

Por lo general, mientras más cercano es el vínculo genético familiar entre dos personas, más fuerte e imperativo es el tabú que prohíbe o reprime las relaciones sexuales entre ellos.

Algunos sociobiólogos relacionan un menor éxito reproductivo con las poblaciones endogámicas que pueden llegar a convertirse en una reserva genética de trastornos hereditarios.

En cambio, algunos antropólogos culturales sostienen que las relaciones exogámicas, debido a la prohibición del incestom, favorecen las alianzas ventajosas.

Otras doctrinas se basan en la necesidad de controlar los celos sexuales dentro de la familia o de controlar la conducta sexual del adulto desde la niñez.

Tabú significa prohibición de tocar, decir o hacer algo por temor a un perjuicio inmediato provocado por una fuerza sobrenatural.

La palabra tabú, de origen polinésico, fue observado por vez primera por el Capital James Cook durante su visita a Tonga en 1771, aunque los tabúes han existido siempre en todas las culturas.

Un tabú puede ser la prohibición de pescar o cazar durante algunas temporadas determinadas, de comer ciertos alimentos, de interactuar con ciertas clases sociales, de tocar cadáveres y en cuanto se refiere a las mujeres la prohibición de realizar determinadas actividades durante la menstruación.

Es incuestionable que algunos tabúes se hayan establecido en las comunidades por necesidades higiénicas, para el mantenimiento de la salud o de la seguridad.

Otros tipos de tabú pudieron tener motivos religiosos, sin explicaciones aparentes, aunque la mayoría de los expertos están de acuerdo en aceptar que parecen tener el objetivo de mantener el orden social.

En las sociedades modernas actuales la mayoría de los casos de incesto que se denuncian habitualmente se refiere a relaciones sexuales entre padres e hijos, muchas veces menores de edad, dando lugar a la figura delictiva conocida como abuso de menores.